¿Cope o la Ser? Esa es la cuestión

Se me ha roto la radio y mi esquizofrenia se acentúa. Sólo sintonizo o la COPE o la SER, y según se escuche una u otra parece que vivieramos en realidades diferentes. Losantos es anfetamínico, estimulante. Tiene un grado de exaltación tal que, si se cumplieran algunas de sus predicciones, sería incapaz de expresarlo: ha agotado el lenguaje. Terrible sí, pero me despierta a base de bien.
Lo de la SER es balsámico. Qué cambios, que país, qué encuestas, qué importante el diálogo, el talante, el consenso. Hablar por hablar. Hablando se entiende la gente. Francino repartiendo cremas hidratantes.
Ya no queda nada para las navidades. Me pongo a pensar en los resúmenes del año 2005 que nos ponen el 31 después de imágenes de la San Silvestre de turno. Seguro que sale Alonso y Pedrosa, Maragall y Cía., el incendio de Guadalajara, la sequía, algo de ETA y el País Vasco, terrorismo islámico, inmigración, la subida del petróleo, buen comportamientos de las bolsas...

En este trimestre se acelera el tiempo y no se porque.